martes, 16 de abril de 2013

Duras son cada de tus palabras para mi poca estabilidad, hieren en lo profundo de mi ser hasta que sin lugar a dar respiro una pequeña lágrima que inunda mi rostro.
Odio y resentimiento creas cada día en mi alma mientras se marchita y se hace cada vez mas oscuras, los rastros de tus sangrientos accionares cada día me van consumiendo.
Amor y al mismo tiempo odio, cariño y al mismo tiempo dolor. ¿Quién te ha enseñado a amar?
Maldigo el día en que caí en tus ruines garras y me sometí a tantos meses de felicidad, los cuales, culminaron en odio, resentimiento y dolor. Me convirtieron y sacaron lo peor de mi, jamás sentí al verme al espejo lástima. Me da lástima en quien me he convertido, en la mujer poco feliz y que cada día sonríe menos.. Solitaria y sin sueños, los cuales, trato de imaginar y convencer de que existen en algún lugar de mi, para simular ser una persona con esperanza.


No hay comentarios:

Publicar un comentario