martes, 9 de febrero de 2010


Y no me vengas con historietas, con novelas, ya eso fue. Ahora la protagonista soy yo, las cosas pasan tan rápido, que los recuerdos quedan muy poco adentro...
Estábamos ahí, entregándonos lo mejor de nosotros, haciendo de una tarde una fantasía y sin importar las consecuencias nos hundimos más y más en lo prohibido, hasta finalizar con un noble suspiro. Éramos capases de reconocer que pecamos ante las puertas de lo que jamás un pensamiento puede llegar a ser realidad; Estábamos ahí, despojados de nuestras ropas y mirándonos con un toque de carisma, con un salpicón de fantasía y mientras nos hacíamos uno, mirábamos cada uno a una meta, donde los ojos no abrían sus párpado, si no la imaginación era la realidad, nos detuvimos a pensar y volvimos a la noble fantasía.
Ya sabemos cada uno su secreto mayor, sabemos la carga de conciencia que cargamos, tenemos en cuenta que lo que paso era algo mas para esa carga, pero no nos importo. Por que sabemos, o por lo menos yo, que esa carga fue hecha por amor, por que jamás podría cambiar ni por el oro más brillante del mundo, las horas que pase entre tus brazos, el momento que viví este día. La situación que nos marcara para siempre…

No hay comentarios:

Publicar un comentario